En 1897 las aristócratas hermanas Hewitt establecieron en Nueva York el primer museo de arte decorativo de Estados Unidos. En 1964 la prestigiosa Smithsonian Institution, adquirió la colección y fue trasladada desde el Cooper Union Building, su primera ubicación, hasta la antigua residencia del magnate industrial Andrew Carnegie, impulsor del Carnegie Hall. La mansión de estilo neorrenacentista, fue construida en 1901 y contaba con 64 habitaciones.
La colección está formada por 250.000 piezas que incluyen cerámicas, telas, lámparas, dibujos, además de una biblioteca con 50.000 volúmenes. Actualmente el edificio está siendo reformado para adaptarse a las necesidades del museo. Permanecerá cerrado hasta 2014.